La República Dominicana no se trata solo de sus playas paradisíacas y aguas turquesas. Su herencia culinaria, rica en sabores e influencias de las culturas africana, española y taína, es una verdadera invitación a viajar. Si estás planeando una escapada tropical, aquí tienes los platos típicos que debes probar sí o sí.
Es imposible hablar de la gastronomía dominicana sin mencionar La Bandera Dominicana, el plato emblemático del país. Su nombre, que significa “la bandera dominicana”, hace referencia a los tres colores de la bandera nacional:
Acompañado de plátanos fritos (tostones), aguacate o ensalada, este plato se sirve en casi todos los hogares dominicanos a la hora del almuerzo.
El Mangú es el plato estrella del desayuno dominicano, apreciado por su carácter nutritivo y reconfortante. Es un puré suave hecho a base de plátanos verdes hervidos y luego machacados, a menudo acompañado de cebollas rojas ligeramente marinadas en vinagre.
¡Pero eso no es todo! Para un plato completo, suele ir acompañado de lo que se conoce como Los Tres Golpes:
Este plato es un verdadero símbolo de la cocina criolla y te proporcionará toda la energía necesaria para descubrir las maravillas de la República Dominicana.
El Sancocho es un guiso abundante y lleno de sabor que ocupa un lugar especial en el corazón de los dominicanos. A menudo se prepara para reuniones familiares, celebraciones o días lluviosos, ya que reconforta tanto el cuerpo como el alma.
Este plato consiste en una deliciosa mezcla de carnes (generalmente res, cerdo y pollo), cocinadas a fuego lento con tubérculos como yuca, ñame y batata. La adición de plátanos y especias locales le otorga un sabor inconfundible. Algunos incluso agregan maíz y cilantro para un toque aromático extra.
El Sancocho es tan apreciado que existe una versión más elaborada llamada Sancocho de Siete Carnes, que, como su nombre indica, contiene siete tipos diferentes de carne. ¡Un manjar imprescindible para disfrutar con calma!
Los Tostones son rodajas de plátano verde, fritas dos veces para lograr el equilibrio perfecto entre crujiente y tierno. Este aperitivo simple pero irresistible acompaña casi todas las comidas en la República Dominicana y se disfruta tanto como entrada como acompañamiento de carnes o pescados.
Tradicionalmente, se sirven con una salsa de ajo o una mayonesa ligeramente picante. En algunos restaurantes, incluso se pueden encontrar versiones reinventadas con camarones, queso derretido o carne molida, para una explosión de sabores.
Originario de Puerto Rico pero muy popular en la República Dominicana, el Mofongo es un plato elaborado con plátanos fritos, majados con ajo, aceite de oliva y chicharrón (piel de cerdo crujiente). Este puré espeso y sabroso se moldea en forma de cúpula y se sirve con diversas guarniciones.
Según tu preferencia, puedes disfrutar del Mofongo acompañado de camarones en salsa, carne desmenuzada o vegetales salteados. Algunos restaurantes también ofrecen versiones con queso derretido, perfectas para quienes aman los platos reconfortantes.
El Pica Pollo es una verdadera institución en la comida callejera dominicana. Este plato consiste en trozos de pollo marinados con especias locales y luego fritos hasta lograr una piel crujiente y dorada.
A diferencia del pollo frito americano, el Pica Pollo suele ser más especiado y se sirve con rodajas de plátano frito (tostones) o papas fritas caseras. Simple, económico y delicioso, es el plato perfecto para una pausa sabrosa después de un día ajetreado.
Las Empanadas dominicanas son pequeños pasteles rellenos con una variedad de ingredientes: carne molida, queso, pollo, verduras o incluso mariscos. Pueden ser fritas o al horno y se venden en casi todas partes, tanto en las calles como en las playas.
Cada región tiene sus propias recetas, y algunas Empanadas están sazonadas con especias locales que les dan un sabor único. Son el aperitivo perfecto para un bocado rápido entre excursiones.
Junto al mar, no hay nada mejor que un buen Pescado Frito, un plato de pescado frito preparado a la perfección. Generalmente, se utiliza pargo rojo o mero, dos pescados conocidos por sus sabores delicados.
El pescado se sazona con limón, ajo y especias locales antes de ser frito, logrando una piel crujiente y una carne tierna. Se sirve con arroz, tostones y una ensalada fresca para una comida ligera y deliciosa frente al océano.